Para ENTC (Esta Noche Te Cuento), Juan Moran nos invita a escribir una historia breve sobre el arte de la fotografía.
NOVIAS DE FOTOGRAFÍA
Después de una travesía que se hizo eterna y no sin
contratiempos, por fin el barco entró en la bahía de San Francisco. Hacía
semanas que mis compañeras de viaje y yo habíamos dejado nuestro Japón natal
para ir al encuentro de los que serían nuestros futuros maridos, durmiendo
hacinadas en camastros en la entrecubierta. Al llegar al puerto nos instaron a
bajar rápidamente; mi petate en una mano y la foto de mi prometido en la otra
descendí por la pasarela mirando el muelle donde una masa de hombres esperaban
impacientes.
Por medio de un megáfono clamaban los nombres de las
pasajeras para que acudieran al control: «Yoshiko Omiya, Hana Uchida...,
Shizuko Kudoh». Al oír mi nombre me dirigí al puesto a entregar mi
documentación. Fue entonces cuando me presentaron a mi novio.
Un anciano desdentado, arrugado como una uva pasa, que por
lo menos me doblaba la edad, se acercó a mí con ademán de ayudarme. Nada que
ver con el joven apuesto de la fotografía que posaba ante un flamante coche.